Oficios olvidados.
En mi recorrido habitual de los domingos por la
sierra de las Villas, me encontré con una imagen nada habitual y que hacia muchísimos
años que no podía contemplar; un par de
mulos arando el campo. Este es un oficio que esta prácticamente en el olvido
tanto por la utilización de la maquinaria agrícola, como por la desaparición de
estos animales.
En la
Fresnedilla se encontraba Santos, abriendo la tierra con el
arado tirado por dos mulas, así que, un alto en el camino para hacer las fotos
y curiosear un poco.
Según comenta
Santos es un trabajo que aprendió de pequeño, pero que fue hace dos años cuando
retomo este ancestral oficio de labrar la tierra con animales. No le ha costado
mucho trabajo recordar la faena, ya que como dice esto es como montar en
bicicleta, nunca se olvida. Además los animales también ayudan puesto que una
de las mulas ya había arado antes y sabia el trabajo que tenía que hacer, solo
es cuestión de guiarlas, ya que los mulos la tendencia es hacia donde les cuesta
menos trabajo tirar del arado.
También afirma que
este año ya han sido tres los que le han avisado para preparar la tierra para
la siembra, puesto que en estos parajes con parcelas pequeñas y escabrosas es
muy complicado que la maquinaria agrícola haga este tipo trabajos.
La parcela a
labrar era la de Eugenio, que quiera aprovechar el terreno para sembrar
patatas. Eugenio también recordó viejos tiempos y se puso a manejar el arado.
Y
recuerda que el aprendió a arar, pero que lo hizo con animales distintos y fue con vacas.